Cécile Guenat, directora creativa y de desarrollo de Richard Mille, ha sumado color y complejidad a la cúspide del tourbillon automático Talisman con la nueva colección RM 71-02: una auténtica obra de arte impregnada de la vibrante esencia de los años setenta, con todo y su destellante glamour, atmósfera teatral e inquietantes ritmos.

Modelo Donna Foto. Lilas Le Quellec

Formada por diez modelos, cada uno limitado a siete piezas, la colección muestra cualidades singulares a través de elecciones altamente simbólicas de piedras preciosas, engastadas con motivos geométricos en toda la caja y en la esfera de 0,90 mm de espesor.

Tsavoritas, espesartinas, amatistas, diamantes, espinelas, rubíes y zafiros conjuran una alquimia magnética. La hematita se asocia a la fortaleza, la malaquita al equilibrio interior, el lapislázuli a la visión, la sugilita a la protección, el ópalo rosa a la regerenación… Una combinación de piedras nunca vista en Richard Mille que aporta gran fuerza y belleza individual a los relojes RM 71-02.

Modelo Jane. Foto. Richard Mille

Guenat necesitó más de seis meses para validar el posicionamiento de las piedras y lograr el efecto preciso que buscaba: hacer tangible la magia de la Era de la música Disco, la cual residía en la multiplicación de tonalidades y texturas.

Saber hacer mecánico y artístico

Si bien, los modelos se diferencian por la disposición de sus piedras, patrón de engaste, grabado y la decoración central de la esfera, todos comparten el mismo calibre CRMT1. Desarrollado para el uso diario, este calibre reafirma el compromiso de la manufactura suiza con la innovación mecánica extrema.

El diseño y la ejecución del guardatiempo demuestran el enfoque holístico de la concepción del movimiento, la caja y el marcar. Foto. Fabien Nissel.

Presentado por primera vez en 2018, como parte de la colección RM 71-01, el calibre CRMT1 es un logro técnico, debido a que el mecanismo del tourbillon está integrado en el corazón de un movimiento de tan solo 6,2 mm de grosor y ocho gramos de peso.

La nueva colección es acompañada de una serie completa de pulseras especialmente diseñadas para cada modelo. Grabadas con discretos motivos vegetales a las 12 horas y líneas geométricas a las 6 horas, las pulseras tienen un tratamiento metálico en charol que realza el impacto visual de las piedras.

Así, cada componente de la colección RM 71-02 Automatic Tourbillon Talisman irradia una energía pura y fascinante como la década de los años setenta, cuyo legado cultural perdurable es universal.

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