¿Te ha tocado un compañero de trabajo indeseable? Aquel que ama hacerle la vida difícil a otras personas. O peor aún, ¿lidias con un jefe acosador o poco empático? Expertos aseguran que hay una solución a este problema.

Hay que destacar lo frecuente que es padecer violencia en el trabajo: uno de cada 5 trabajadores se ha enfrentado a este problema, de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo.

Y entre las consecuencias también alarmantes, dicen especialistas, se tiene detectado que los ambientes tóxicos, consecuencia del trato hostil de algún compañero o de los jefes, afectan la autoestima del personal y hacen que la satisfacción laboral disminuya, propiciando un costo monetario a las organizaciones.

Red Forbes: Atender la salud mental en la oficina, un gran paso en la construcción de mejores ambientes laborales

Es fundamental desde una perspectiva tanto psicológica como económica reconocer los costos de un clima laboral tóxico, de acuerdo con Yunue Cárdenas, coordinadora del hub de psicología de Affor Health, empresa especializada en gestionar y mejorar la salud psicosocial de las personas en las organizaciones.

Por principio, el acoso laboral puede inducir a las víctimas a faltar al trabajo, incluso, a renunciar debido al estrés y la ansiedad, lo que propicia en la organización costos por contrataciones y capacitación de nuevos empleados.

Un ambiente laboral negativo también afecta la productividad de los empleados porque tienden a estar distraídos, desmotivados y menos comprometidos, según Cárdenas.

Y peor aún las organizaciones se arriesgan a enfrentar demandas legales y daños en su reputación que pueden también resultar en costos económicos significativos.

¿Cómo frenar al tóxico de la oficina?

De acuerdo con Yunue Cárdenas, ante los ambientes tóxicos en el trabajo es imperativo que las empresas implementen políticas y protocolos de prevención y gestión del acoso laboral.

No deben faltar los programas de atención psicológica para los empleados, y deben ofrecerse de forma permanente, comenta.

Nora Taboada, coach ejecutiva y fundadora de la consultora AFE-Liderazgo Consciente, sugiere ejecutar un proceso personal que debe funcionar ante un ambiente hostil.

“Primero debes tener claras tus prioridades, analizar qué significa para ti el balance vida-trabajo, qué significa tener una carrera, la armonía, las relaciones sanas, el crecimiento profesional, la salud, qué significan tus pasiones y tus intereses”, dice.

Una vez definidos cada uno de esos aspectos, obtendrás claridad respecto a las prioridades, indica la especialista.

Entonces, “al tener claras tus prioridades, ya sabes qué estas protegiendo, y pondrás límites que son un escudo protector a esas prioridades”, asegura.

Advierte que las personas que no logran definir sus prioridades tampoco ubican qué proteger.

Sugiere que ante un jefe tóxico lo adecuado es confrontarlo, exponiéndole las necesidades y dándole retroalimentación.

“Si quieres que presente este reporte en la fecha tal, necesito que se me envíe la información con dos semanas de anticipación”, ejemplifica la coach ejecutiva.

“Si no hablas directo con el jefe, no se crea la cultura de retroalimentación, empiezan los chismes, y el jefe nunca se entera de lo que está pasando”, señala.

Añade que en México suelen normalizarse los comportamientos tóxicos, aunque siempre es importante identificarlos.

“Si algo que te hacen o te dicen y te parece grosero, hostil o descortés, hazle caso. Es una bandera roja de que algo no está bien”, indica.

¿Usas Facebook?, déjanos un like para estar informado

 

Siguientes artículos

Cuidar al personal regresa a las empresas hasta 150% de su inversión: estudio
Por

Al ofrecer más de cuatro ofertas de bienestar al personal, las compañías obtienen beneficios como menor rotación, dice u...