El presupuesto del gobierno de Andrés Manuel López Obrador para 2024 tiene un enfoque electoral, ya que impulsa el gasto social y proyectos de infraestructura en entidades donde gobierna la oposición, aseguró el coordinador del Laboratorio en Comercio, Economía y Negocios (LACEN), José Ignacio Martínez Cortés.
“Es un presupuesto con incremento en el gasto social dirigido principalmente a fortalecer e incrementar entre las beneficiadas y los beneficiados su respaldo al gobierno y, por ende, encaminado para apoyar a Claudia Sheinbaum”, dijo el maestro en Relaciones Internacionales de la UNAM.
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El investigador de LACEN, un think tank de la UNAM, dijo que el gobierno de López Obrador aumenta la inversión pública en materia de infraestructura física en carreteras, puertos, tendidos férreos, aeropuertos y telecomunicaciones en el sursureste y en las entidades donde gobierna la oposición, como Nuevo León, Guanajuato, Chihuahua, Coahuila, Aguascalientes y Querétaro.
“A diferencia de hace un año, la política económica para 2024, la inflación y el tipo de cambio son variables que favorecen el aumento del consumo privado”, afirmó el especialista en temas económicos.
Expuso que el gasto en infraestructura física, además del panorama positivo en la macroeconomía y el factor nearshoring influyen para que aumente la inversión fija bruta, principalmente en el rubro de la construcción no residencial que ha crecido de manera exponencial.
La mejora de la confianza empresarial y de la confianza del consumidor inciden en una escalada de la inversión industrial, que representa una mayor creación de empleo y que se traduce en un incremento en la recaudación de impuestos, señaló.
“Si se mantiene el optimismo en la macroeconomía, continúa mejorando el ambiente en la microeconomía y se ejerce en tiempo y forma el gasto presupuestado, 2024 será un año cuyo resultado económico se verá en las urnas el 2 de junio de 2024 favoreciendo a Sheinbaum”, manifestó.
El coordinador de LACEN señaló que faltan nueve meses para que termine el sexenio del presidente Andrés López Obrador, y de enero a septiembre el país estará en dos grandes frentes muy importantes, la política electoral y la política económica, donde el presupuesto económico 2024 contiene tintes electorales.
“Si la economía en los próximos seis meses continúa con fuertes signos positivos incidirá en las elecciones del próximo 2 de junio, principalmente la presidencial”, aseguró.
Recordó que según estimaciones en 2023 la economía mexicana crecerá 3.5% y luego se desacelerará a 2.7% en 2024.
Señaló que las dos próximas reuniones de Banxico se realizarán el 8 de febrero y el 21 de marzo, por lo que en el primer trimestre se verá si las tasas de interés se reducen, lo que tendría un doble impacto en el consumo, ya que aumentaría las compras con una inflación a la baja y un aumento al salario mínimo que beneficia a 8 millones de trabajadores.
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“Por ello la consumidora y la empresaria aumentan su confianza en la economía”, dijo.
Agregó que la media de los indicadores de confianza empresarial y la opinión de directivos en industrias manufactureras, construcción, comercio y servicios privados no financieros en torno a la situación económica futura del país es de 58.3 puntos; asimismo, la situación económica futura de la empresa es de 62.7 puntos.
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