Joaquín Restrepo es como un niño curioso que juega con la tecnología y el arte. Desde muy joven se interesó por estos polos y ahora cuenta con una exposición en el Centro Administrativo del Condado de Orange, en Orlando, Florida, nombrada “Intus” que juegan con la dualidad del ser. Forbes Life tuvo la oportunidad de platicar con Restrepo sobre esta interconexión entre la tecnología y el arte.

Suscríbete a nuestro newsletter semanal aquí

Joaquín combina el dibujo, las esculturas y la inteligencia artificial para desarrollar su creatividad y crear composiciones que funcionan como una expresión de la interioridad del ser humano y su complejidad.

Un poco de historia

Lo que llamó la atención, del que fuese un niño por la década de los 90 fue la tecnología, primero, rompiendo la tradición del regalo común por la primera comunión en Colombia (no regalos, no viaje, no fiesta) para obtener una computadora, y luego lidereando una revolución infantil en su colegio para que a él y a su grupo los dejarán entrar a clases de informática: “lo único que te enseñaban en esa época era a programar, era una Apple 2, yo de hecho desde esa época no soy tan amante de Apple porque era como una pantalla verde y te tocaba escribir todo lo que fueras a hacer y yo no entendía que era lo que pasaba”.

Joaquín Restrepo
Foto: cortesía Joaquín Restrepo

A medida que avanzaba en el colegio, el amor por el arte creció, pero éste se solidificó cuando a los 11 años fue a Roma como parte de una excursión escolar y las esculturas de Gian Lorenzo Bernini y Miguel Ángel lo impresionaron al grado de crear sensaciones que parecerían fuera de lo común, “yo cuando veo arte bueno me pongo muy torpe y me voy de cara, me pongo nervioso y no sé qué hacer con mi cuerpo ni con mi vida”.

A partir de ahí comenzó un largo entrenamiento en dibujo y pintura. Lo que comenzó como una curiosidad por el arte y la tecnología se convirtió en una vocación uno no se dedica al arte porque sea la decisión más inteligente, sino porque uno de verdad lo necesita y si uno no está haciendo eso uno se enloquece”.

Esto te interesa: “Camino a casa”: la muestra de arte que ahonda en la rutina diaria

Inteligencia Artificial

A su vez, admite que entrar en el mundo de la inteligencia artificial le valió topar con pared muchas veces hasta que un conocido le recordó que no debía reinventar la rueda, sino jugar con aquello que ya estaba disponible y que le era entendible. La diferencia en cómo un ingeniero mira la tecnología a como un artista la mira es que el ingeniero tiene una cantidad de leyes preestablecidas, ya organizadas de como las van a trabajar; el artista todo el tiempo está mirando cuáles son los límites, cómo podemos dañar la programación, cómo podemos hacer que esto haga una cosa que no debe hacer”.

Ahora, el Joaquín adulto busca que su trabajo tenga como fin la búsqueda del autoconocimiento e invita a las personas a que se autodescubran, “de una u otra forma digamos que mi obra tiende a ser muy autobiográfica, uno comienza a mitigar todo lo que va sucediendo y todo lo que pasa, luego lo paso por una especie de filtro atemporal porque a mí me interesa encontrar esas cosas que de pronto se pueden conectar a mí con aquella persona que vivió hace dos mil años o con aquella persona que va a vivir dentro de mil años, como cuáles son esos arquetipos que tenemos en común, esos valores que nos entremezclan a todos”.

Intus
Foto: cortesía Joaquín Restrepo

Además, la forma de trabajar cada una de sus piezas rompe un esquema que para muchos artistas es común aplicar “si tú normalmente partes de una idea, pero luego esa idea la conviertes en algo real, lo que estás haciendo es ilustrar la idea. A mí me interesa mucho el trabajo al revés que es comenzar a hacer una cantidad de cosas que no comprendo y luego intentar encontrarles ese significado posterior, como para poder aprender algo de esa mezcla de cosas que pueden ser nada”.

‘Intus’ y las inspiraciones

En Intus, el escultor busca mostrar el encuentro y desencuentro, de cuando uno conecta con el otro y con uno mismo, “esos proceso de encuentro, todas esos secretos y esas cosas que se comienzan a generar y de repente el monstruo que se vuelve esa cosa y se separa”.

Joaquín Restrepo
Foto: cortesía Joaquín Restrepo

Intus, en palabras del propio Restrepo, es una de tantas esculturas que precisamente busca mostrar todo ese proceso. Aunque algunas son parecidas, todas tienen un nombre diferente, dependiendo del espacio en el que están.

Lo que viene

Actualmente el artista prepara un “ejército de esculturas” en el Museo Santa Clara, en Bogotá, Colombia, que llevará el nombre de “Encuentros”, nos cuenta que todas estas esculturas se encuentran y desencuentran en distintos puntos.

¡No te lo puedes perder!: #DeNuestraRevista: Creación infinita

El plus será que las pinturas coloniales que hay dentro de la nave del claustro utilizará inteligencia artificial para animarlas a través de una capa digital en realidad aumentada, “la idea es buscar la contraparte de cada uno de los cuadros, el lado oscuro de las pinturas que hay ahí“.

Intus
Foto: cortesía Joaquín Restrepo

Para Joaquín, la inteligencia artificial le permite explotar su creatividad “porque esto es un diálogo que tú empiezas a tener con la máquina que al fin y al cabo lo que tú estás haciendo no es un diálogo con la máquina, sino que estás haciendo un diálogo con las millones de personas y de información que se metieron dentro de esta Inteligencia Artificial”, y lo que le parece maravilloso es que no sabe cuál será el resultado de jugar con la combinación de algoritmos

“La idea es intentar entender o encontrar ese inconsciente colectivo a través del uso de la Inteligencia Artificial, yo creo que eso es lo que yo intento hacer”.

Joaquín Restrepo

Síguenos en:

Instagram

Facebook

Twitter

 

Siguientes artículos

actividades CDMX
Agenda cultural en Ciudad de México para Semana Santa
Por

Si no planeas salir de la CDMX, aprovecha estos días de asueto por semana santa y escápate a uno de estos espacios cultu...